M.Sc. Patricia Oliva Barboza
Percibo que, en la Investigación, las artes despiertan cierta sospecha, como pasa también con las Ciencias Sociales que no siempre son igualmente valoradas como ciencia. Quienes exploramos desde las artes (en sus distintas expresiones) percibimos esa “cara de duda” cuando comentamos de nuestros proyectos, investigaciones y propuestas, por eso le llamé a este blog: Atravesando con arte los saberes.
Atravesar, entrar sin permiso, incomodar, intervenir, son palabras que me permiten describir, aunque sea sólo un poco, la sensación de investigar desde las artes.
Indagar desde/con/para las artes es repensar otras formas de comunicar, otros lenguajes de escritura, otros medios de búsqueda de información, otros métodos no tan conocidos de generar conocimiento.
La sospecha aumenta cuando son proyectos sobre arte que se sostienen desde teorías críticas como la teoría feminista o bien desde la lucha por los derechos de las personas con menos oportunidades que son discriminadas en una sociedad desigual, lo cual prácticamente es el abordaje de una gran mayoría de los proyectos en Ciencias Sociales.
Compañeras de arte y compañeros(as) de investigación del CICDE[1] lo sabemos bien. Destaco el trabajo de Luis Alonso Herra Rojas, él conoce bien el significado de “atravesar” con sus propuestas que fusionan estudios en arquitectura con las luchas LGBTIQ+, nosotres sabemos que nuestro trabajo es más sospechoso, levanta cierta duda e incomodidad.
Mi proceso de “atravesar la investigación” me acercó a las artistas escénicas costarricenses no desde la práctica de la danza, esta vez fue un “acercarse distinto” desarrollando un proyecto para visibilizar la desigualdad de las mujeres en la danza y el teatro. Para muchas de las artistas (bailarinas y actrices) fue interesante sentirse parte de un proyecto de investigación, claro que ya existían investigaciones importantes, desde otros enfoques, en todo caso fue un momento que activó una alerta importante
Un segundo proyecto me permitió explorar a partir de las escenas de dos obras de arte como medios de información, ello significó colocar el arte como fuente primaria de recopilación y producción de conocimiento.
La experiencia de construir un archivo sobre arte y diversidad, lo que podría parecer un simple listado evidencia que todo registro o recopilación tiene un significado político. El Archivo diverso lo componen artistas que si no se registran mueren en la historia, utilizando el término de Pollock[2]: se trata de una “intervención histórica”. Los archivos y registros que venimos haciendo desde nuestros proyectos son un ejercicio de intervención: “nos toca atravesar también la historia”.
Una se da cuenta de lo “atravesada” que pueden ser nuestras propuestas cuando en una reciente actividad de presentación del libro: Removiéndonos. Danza y cotidianidad durante la pandemia (en coautoría con Vanessa de la O) que se realizó en la Escuela Superior de Danza de Málaga, reconocen la urgencia de fortalecer mucho más los vínculos entre investigación y danza, y la importancia de promover la investigación entre los y las estudiantes de arte.
Nunca tuve tanta claridad en la utilización de la danza como técnica de investigación, ni en el movimiento como búsqueda teórica, crear desde nosotres siempre será necesario.
“Atravesar” es lograr un análisis a partir de una obra, generar análisis desde la corporalidad y el movimiento, que el cuerpo sea la fuente base.
Atravesar la calle en rojo, sin permiso, pasar un poquito por encima de los espacios académicos conservadores.
Atravesar los espacios en los que no deberíamos estar, en donde no nos esperan, ahí es donde es necesario continuar.
[2] Griselda Pollock, Visión y Diferencia. Feminismo, feminidad e historias del arte (Buenos Aires: Fioro,2015)