Autoras1:
Ph.D. Ana Lucía Fernández Fernández
Licda. Backtori Golen Zúñiga
Movimiento
Somos una especie en viaje, no tenemos pertenencias sino equipaje, vamos con el polen en el viento, estamos vivos porque estamos en movimiento. Nunca estamos quietos, somos trashumantes, somos padres, hijos, nietos y bisnietos de inmigrantes.
(Jorge Drexler ‧ 2017)
La movilidad humana ha sido uno de los fenómenos más viejos, extendidos y naturales de la condición humana. La misma está asociada a nuestra condición de seres vivos, y de procurar nuestra sobrevivencia, por ende, nuestra vulnerabilidad. Esto implica que en la medida que existamos estaremos constantemente enfrentados con la posibilidad de la muerte y, por ende, al cambio, y en ello radica la paradoja de nuestras vidas.
Sin duda, esta paradoja describe nuestra fragilidad como seres vivos, pero al mismo tiempo, para algunos humanos esta sería la situación sine qua non, un evento único en circunstancias específicas que responden a un contexto particular (Heidegger, 1962).
Por eso, la movilidad humana se constituye en sí misma como una estrategia de resistencia, puesto que nos confrontarnos constantemente como humanidad a eventos ambientales, políticos, económicos, sociales y culturales que ponen en riesgo no sólo nuestro bienestar, sino la propia sobrevivencia. Las causas que llevan a pueblos enteros a movilizarse geográficamente o a familias particulares son distintas y de diferente índole, pero pocas veces son unicausales.
Para muchas personas, la situación única y extraordinaria en donde la vida se encuentra en riesgo, no se percibe como un evento único sino, que es la característica recurrente y constante de su propia existencia, en palabras de Franz Fanon (1965), sería el Damné: Esa persona que vive su vida en relación con la muerte como una constante, la sobrevivencia como parte de su vida cotidiana y que, por lo general, son personas que se encuentran racializadas, generizadas y por ende discriminadas e invisibilizadas dentro del orden mundial.
De acuerdo con el reporte mundial de migraciones del año 2024 de la Organización Internacional de las Migraciones en el mundo hay 281 millones de migrantes internacionales lo que equivale a 3,6% de la población mundial (McAuliffe & Oucho, 2024). Sin embargo, cada vez son más las personas que se ven obligadas a desplazarse, tanto dentro de su país de origen, como hacia países vecinos, debido a situaciones de conflicto, violencia, inestabilidad política o económica, el cambio climático u otros desastres.
Actualmente vivimos en un mundo que organiza la existencia bajo un sistema que antepone el capital sobre la vida, y, por ende, en muchos países prima el poder y el dinero sobre las condiciones materiales de existencia que hacen posible el bienestar.
En las últimas semanas hemos visto en los principales noticieros y en redes sociales, como las terribles promesas de Donald Trump de campaña se han vuelto realidad. Ha empezado con el tema favorito de la derecha radical, deshacerse de las personas “migrantes indeseadas”, vistas como “criminales” (Bermejo, 2025).
Hemos visto un proceso sistemático de control racializado llamado “redadas”, donde muchas personas migrantes han sido el blanco de control de documentos, y deportación a manos de los patrulleros del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Estas deportaciones se han hecho de manera masiva, en aviones militares y con las personas esposadas, dando un mensaje mediático que infunda miedo y angustia.
Criminalizar la migración es la forma más deficiente de explicar un fenómeno tan antiguo y inherente de la humanidad. ¿Quién no ha escuchado que en su propia familia se habla de alguien que vino de algún otro pueblo, de alguna otra provincia, de algún otro país o de algún otro continente?
Todas y todos somos foráneos de alguna u otro forma, porque todos compartimos una historia marcada por la movilidad humana como una respuesta a la adversidad, que tuvo como resultado la formación de millones de familias, de miles de pueblos, de cientos de países y de todas las naciones.
En ese sentido, debemos entender ahora más que nunca, que la movilidad humana ha supuesto parte fundamental de las sociedades, que migrar con o sin documentación, ha sido parte de nuestra historia y que un papel no debería determina la vida y el bienestar de familias enteras que buscan una mejor vida, y que muchas veces esta es la única estrategia de sobrevivencia.
1Este blog se realiza el marco de la investigación "Configuraciones de la violencia: Dinámicas migratorias y bienestar de personas que requieren protección internacional. Una investigación en Costa Rica" realizado de manera conjunta entre la Universidad de Texas en Austin y el CICDE-UNED.
Bibliografía
- Bermejo Casado Rut y Sigmon Eric (10 Feb 2025) Los ambiciosos objetivos de deportación de Trump (1ª parte): ¿cuántos migrantes y cuáles? Real instituto alcano. Periódico en línea. Encontrado en https://www.realinstitutoelcano.org/analisis/los-ambiciosos-objetivos-de-deportacion-de-trump-1a-parte-cuantos-migrantes-y-cuales/
- Drexler, Jorge. (2017). Canción (Movimiento). Álbum Salvavidas de hielo, grabado con guitarras en Ciudad de México y Madrid.
- Fanon, Franz. (1965 [1961]). Los condenados de la tierra (2.a ed.). Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires.
- Heidegger, Martin. (1962 [1927]). Being and Time. (J. Macquarrie & E. Robinson, Trads.). Harper Collins, San Francisco.
- McAuliffe, Marie y Linda Adhiambo Oucho (2024). Informe sobre las Migraciones en el Mundo 2024. Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Ginebra.
1 Este blog se realiza el marco de la investigación "Configuraciones de la violencia: Dinámicas migratorias y bienestar de personas que requieren protección internacional. Una investigación en Costa Rica" realizado de manera conjunta entre la Universidad de Texas en Austin y el CICDE-UNED.